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EL CERRO LAS MONJAS Y LAS FORTALEZAS REDONDAS
Fortaleza A
El Cerro Las Monjas ofrece una imponente presentación de claustros de doble muro circular, especialmente cuando se le mira desde la Puerta Oeste o desde la falda de la colina que está al interior y a mayor altura de ésta. El lector podrá ver esto con claridad si mira la lámina 9,a. La posición general de estos edificios redondeados se indica en fig.6 y los detalles de su plano y característica se muestran con amplitud en fig.11.
Hay seis de estas estructuras en el Cerro Las Monjas. Fue posible hacer planos transversales solo de tres de ellas, Fortalezas A, B y D; pero esbozos de planos pudimos hacer de las Fortalezas C y F. La Fortaleza E, que es la más grande de este grupo de estructuras, no fue inspeccionada porque el completo estado de destrucción en que se encuentran los numerosos edificios rectangulares de su parte central, nos llevó a creer que ni un esbozo de plano sería de algún valor.
El examen efectuado por Uhle de éstas mismas estructuras, le convencieron de que nada tuvieron que ver con los Incas ni las Vírgenes del Sol y que representaban viviendas fuertemente defendidas. En resumen, creo que cualquiera que estudie fig.11 , llegará a esta misma conclusión. Señalaré en el curso de mi descripción de estos edificios; un número de características que parecen indicar que fueron ocupados por un largo tiempo y que representan más de un periodo en materia de construcciones. La Fortaleza A es la mejor conservada de todas. Hice limpiar toda la densa vegetación de su interior, con el objeto de hacer un plano tan exacto como fuera posible.
El doble muro que forma la coraza exterior de la Fortaleza A, tiene paredes de l m. de espesor a la altura de un metro sobre los cimientos y el pasadizo interno tiene una anchura de 2.5 m. . El pasadizo tuvo originalmente cuatro hileras horizontales de salidizos. Esta también dividido en compartimientos por veintidós paredes transversales. Una de estas paredes transversales, la que se indica en fig.11, tenía una altura. de 3 m. más que las de mas, lo que viene a indicar que es posible que algunos de los muros transversales se extendieron sobre el nivel del segundo piso. Algo que resulta inexplicable es que las hileras horizontales de salidizos no siguen una línea uniforme ni en nivel ni en altura al rededor de la circunferencia de la galería, sino que cambian de nivel como puede observarse en lamina 12,d . La dificultad en comprender esto, es aumentada por el hecho de que a excepción de la hilera trabajada de salidizos (véase lámina 12.b , c) que forman lo que podríamos considerar los soportes, pueden ser observadas alrededor de la galería circular, por la destrucción de los muros.
El aspecto interno del muro interior, esta bien conservado en b en figura 11 (véase también lámina 12,d). Aquí el segundo nivel de salidizos lleva encima una serie de nichos pequeños de la misma manera que ocurre en los muros de Galería E (véase lámina 12,a). Es evidente que esta disposición de los salidizos y nichos no podría haber sido para sostener un piso. Uno debe considerar de nuevo la probabilidad de que las hileras de salidizos y nichos solo fueron llenados con un fin decorativo. Aún queda la alternativa: su empleo como soportes de techos o para facilitar el trabajo durante el proceso de construcción de la pared. En este sentido, habrían servido de soportes para andamios; esta aplicación es en mi conocer poco problemática.
El muro mostrado en c en fig.11 sigue la curvatura del muro interno de la galería circular pero a 2.5 m. más adentro. El extremo oriental de este tercer muro curvo está intacto y completo. Da la apariencia de ser una pared-cortina, pero su situación es tal que este término parece ser inaplicable, pues por lo que puede verse, no protege ni encierra nada, situada como está dentro de la fortaleza.
La parte central de fortaleza A está dividida igualmente entre un área que parece no haber sido jamás ocupada por construcciones, y otra área cubierta por edificios rectangulares. Tres excavaciones (Nos. 12-14) se efectuaron en diferentes puntos dentro de los edificios rectangulares, las que se indican en fig.11. El edificio en d y los de e y f tienen todos ciertas peculiaridades, principalmente son de construcción más fuerte y de mejor calidad, lo que viene a reforzar la opinión que se tiene, de que fueron edificios o partes de edificio construidos en la misma época en que se edificó la galería circular principal.
La mayoría de los otros edificios se encuentra en ruinoso estado y consiste de cuartos rústicamente construidos con ripio, cuya disposición y relación tiene con los edificios en d, e y f como con la galería de doble muro, dan evidencia de que representan no sólo uno si no muchos periodos posteriores en construcción.
En ningún sitio las excavaciones tienen profundidad, pues la roca se encuentra en todas partes cerca de la superficie. El material arqueológico que se obtuvo confirma la creencia de que hubo dos periodos de construcción.
Hay otros muchos puntos en relación con la construcción y arquitectura en Fortaleza A que deben mencionarse antes de pasar a describir las otras fortalezas. En g hay marcada evidencia que los radios de curvatura de la galería hacia el norte de este punto, habían sido tomados demasiado pequeños, y que una rectificación se hizo hacia el sur de este punto. Hay ventanas notables en la línea, tanto del muro interno como del externo. Hay ventanas (W), nichos (N) y puertas de entrada. El término "Ventana" es probablemente inaplicable. En realidad, las "ventanas" son unas aberturas de 70 á 80 cm. de ancho en el muro interno de la galería.
Ninguna tiene en la actualidad dinteles, de modo que no se puede determinar la altura, pero es probable que no fue menor de 1.5 m. ni mayor de 1.8 m. . Todas están colocadas a una altura mayor que los salidizos y abiertos en el segundo piso de la galería (lámina 12.b). Su representación en el plano parece ser irregular, debido principalmente al hecho de que las hiladas superiores de la mayor parte de la pared interna están muy destruidas. Me inclino a creer que originalmente estaban espaciadas con cierta regularidad Por otra parte, los nichos presentaban mayor irregularidad tanto en el nivel de las ventanas como en su nivel superior, estos varían de tamaño entre 25 x 25 cm. y 40 x 50 cm. , y podrían o no atravesar la pared. Podrían estar asociados con una hilera de salidizos como en b ó podrían estar situados independientemente. Las puertas de entrada en los muros principales de la fortaleza se indica en el plano. Hay dos en el muro interior de la galería circular; una de ellas se muestra en lámina ll,b. En la actualidad ambas conducen a un compartimento y no tienen acceso directo a la abertura única del muro exterior de la galería. Esta última se abre ha una serie de terrazas de tamaño mediano rústicamente bordeadas por piedras tendidas. Esta entrada externa tiene 70 cm. de ancho y 1.3 m. de alto. Las dos entradas en el muro interno de la galería tienen más o menos las mismas proporciones, pero son algo más pequeñas.
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