El Proyecto "Catequil" es un proyecto interdisciplinario de alcance internacional. Su objetivo es un estudio integral del oráculo huamachuquino a base de datos arqueológicos, documentos históricos, y tradiciones orales.
Con este fin, se revisó las descripciones históricas de la ubicación del santuario de Catequil (de interés se reviso en especial a Betanzos 1987 [1551]; San Pedro 1992 [1560]; Albornoz 1984 [1583-84]; Arriaga 1968 [1621]; Calancha 1974-82 [1638]; Castro de Trelles 1992; Torres 1657); otras fuentes que mencionan a Catequil incluyen Atienza (1931 [1572-75]); Molina (el Almagrista 1968 [1552]); Sarmiento de Gamboa (1907 [ 1572] ); Acosta ( 1940); Salomón (1991); Taylor (1987), visitandose la zona de San José de Porcón en 1997, buscando un paisaje que podría corresponder a las descripciones históricas sobre el paisaje alrededor del santuario de Catequil, o sea un cerro alto con tres peñas grandes con un "pueblo" a su pie para el servicio de la huaca.
Identificamos la cara sureste de Cerro Icchal (Figura 1) con las peñas descritas en las fuentes históricas y a su pie encontramos en un corral de caballos piedras labradas. El dueño nos mostró tiestos procedentes de sus chacras y nos invitó hacer investigaciones en el corral.
Así, solicitamos fondos para un proyecto de duración de tres años, los cuales fueron otorgados por el Consejo de Investigaciones en las Ciencias Sociales y Humanidades de Canadá (SSHRC) en 1998. El Instituto Nacional de Cultura autorizó la investigación arqueológica e hicimos 20 días de excavación durante julio y agosto de 1998. El informe que sigue a la continuación describe los resultados de estas investigaciones.
Pero El Proyecto "Catequil" tiene como una de sus metas el estudio de la difusión del culto de Catequil al Ecuador, una difusión que fue promovida durante el reino de Huayna Capac como parte de su reorganización de las provincias centrales del Ecuador (Topic 1999; Topic et al. en prensa). Ubicamos siete localidades en las provincias de Pichincha, Cotopaxi, Tungurahua, Bolivar, y Chimborazo que todavía llevan el topónimo "Catequilla". El investigador principal hizo un estudio detallado de los documentos históricos archivados en el Archivo Nacional de Historia (Quito) durante enero y febrero de 1999 acerca del impacto incaico en las inmediaciones de cada una de estas localidades. Fue posible averiguar que los Incas pusieron mitrnaqkuna en todas estas localidades como parte de su reorganización. En mayo y junio de 1999, se hizo reconocimientos de las localidades para precisar las ubicaciones de los lugares con el topónimo "Catequilla". El reconocimiento ubicó siete manantiales, mayormente manantiales que tienen un gran flujo de agua, que correspondían a los topónimos "Catequilla". Entrevistas con los moradores de los sitios confirmaron que son los mismos manantiales que llevan el topónimo y que las manantiales mayormente son considerados como aguas medicinales. Además, en dos casos (El Huayco y Chambo) los manantiales son todavía lugares de peregrinaje asociados con un culto a la Virgen y tienen capillas impresionantes construidos sobre la mismo manantial.
Fue prevista una segunda temporada de excavación en San José para el año 2000, pero ésta fue postergada porque el investigador principal se encontraba con cáncer y necesitaba tratamiento de radiación durante junio-agosto. Felizmente, el tratamiento parece haber sido exitoso, permitiendo la continuación de las investigaciones en 2001.