En Coipín, en la base Norte de Marca Huamachuco, ha existido un caserío semejante pero pequeño, al de Viracochapampa, cuyas ruinas aún existen. Puede haber sido otro caserío parecido, fundado por el Inca. Cuando estuve en Huamachuco, a mi regreso de Marca Huamachuco, conseguí diversos objetos, más de piedra, como por ejemplo:
1- Una piedra parecida a un pilar con dos caras toscas, procedente de Urpay (valle al Sur de Amaru). Fue encontrado entre muros destruidos y parece haber pertenecido a pobladores aborígenes de escasa civilización, Es esta una de las etapas de civilización que deben considerarse para la historia antigua de Huamachuco.
2.- Una cabeza de piedra con facciones detalladas en la cara, encontrada en Ucros, más o menos a una milla hacia el Sur de Viracochapampa. Al verla, inmediatamente la señalé como perteneciente al período incaico. Las dos figuras de piedra que están frente a la puerta de la iglesia moderna de Tiahuanaco (como los trabajos del Sr. Stubel y mío), aunque más grandes, pertenecen, en mi opinión, al mismo estilo. Todas las esculturas de piedra del Perú son en extremo raras, y hasta puede decirse que no existen. Esto obedece en parte al hecho de que la mayor parte de él las han sido destruidas por el Clero Católico de siglos pasados y en parte, porque el Gobierno Peruano trató de impedir su exportación.
Las esculturas de piedra como las que pertenecieron a la civilización incaica, son sumamente interesantes. El Sr. Bollaert presenta dos cabezas de piedra, como procedentes de Huamachuco, en una de las fotografías de su trabajo, Aún cuando el diseño es un poco diferente, me inclino a creer que el Sr. Bollaert se refirió a la misma piedra que yo adquirí, acompañada de otra. Es curioso que en ambos casos se trate de dos cabezas de piedra, Pues el Sr. Bollaert representa dos piedras, diciendo que existían ocho primitivamente pero todo cuanto dice sobre el particular parece dudoso y quizás si la existencia de las dos piedras que reproduce, es la única verdad que puede probar. Con respecto a la piedra procedente de Ucros obtenida para San Francisco, es evidente que en un principio existieron dos, una de las cuales ha sido transportada a algún lugar desconocido del país. Sería de gran interés si pudieramos probar que esos trabajos de escultura, de los que han hablado los viajeros anteriormente, no se han perdido totalmente y que han sido salvados, por mi expedición, para la ciencia.
3.- Lo mismo hemos de decir de las esculturas que representan cabezas formidables de serpientes mitológicas, de las que he hablado antes. El Sr. Wiener ha reproducido una de estas pésimamente en su trabajo, de modo que era imposible comprender que se representaba. Creo que la piedra representada por el Sr. Charles Wiener ha sido adquirida por mí para la Ciencia, pues la tengo ahora en mi colección. Aún las piedras, como decía anteriormente, representaban un tipo más antiguo de civilización pre-incaica dependiente de aquel que produjo los monumentales trabajos de piedra que aún existen en el Tiahuanaco en Bolivia.
4.- En Paranshique, a una legua más o menos hacia el Este de Huamachuco, frente al llamado "Cerro El Toro", que contiene oro y que es trabajado por algunos mineros, encontré dos esculturas más de cabezas de piedra. Sorprende ver que su estilo corresponde al empleado en la fabricación de finas vasijas pintadas que encontré cerca de las Huacas del Sol en Moche y en toda esta parte costeña del Perú. Porque ningún depósito de este estilo fue encortinado en toda esta región del interior del Perú. Como yo atribuyo una edad de 1000 años, por lo menos, a los depósitos de la Costa, las dos cabezas aludidas encontradas en Paranshique, cerca de Huamachuco, deben haber pertenecido a la misma edad. Es interesante ver que la colección de Huamachuco contiene ejemplos valiosos y característicos de trabajos de antigua escultura perteneciente, por lo menos, a cuatro periodos notables de la historia del Perú.