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Fase III
En esta fase se inicia el refinamiento de la cultura cuyos elementos
concurrentes se refunden armoniosamente para dar lugar a la cristalización
material y artística. El ceramio presenta formas ligeramente un poco más grandes
que la fase anterior, sin embargo también se hicieron pequeñas esculturas
antropomorfas, de manera general, el recipiente presenta morfológicamente un asa
estribo de forma elíptica, con pico pequeño de tendencia acampanulada que remata
en un reborde casi imperceptible, ambos trabajados notablemente con líneas
armónicas y proporcionadas que le dan mucha esbeltez.
En este periodo se alcanza una textura fina y el engobe es también proporcionalmente cuidadoso su tratamiento y pulido. La presentación de la cocción es mucho mas uniforme, denotando una perfección en dicho tratamiento.
La decoración, y la representaciones estuvieron dirigidas a mostrar algunos aspectos de la vida Moche: cacería, pesca, caza de lobos marinos, escenas de guerra, curanderismo, personajes importantes, algunas enfermedades y malformaciones, alguna flora y fauna, escenas seculares y no seculares. Sus manifestaciones de escultura en la forma que daban al cuerpo del ceramios son verdaderos retratos de personas cuyas representaciones mostraban a individuos de la vida real.
La morfología de las vasijas tiene una tendencia notoria en donde el asa estribo y gollete tubular acampanulado, antropomorfos de cuerpo entero, antropomorfos sobre recipiente cilíndrico, globular o cúbicos; caras sobre recipiente globulares de asa estribo, botelliformes antropomorfos con asa, zoomorfos de asa estribo en caras o cuerpo entero del animal sea fitomorfo, así como la tendencia en vasos de doble recipiente de pico recto y puente ligeramente achatado; están presentes en esta fase así como otras modalidades de producción en la cual esta presente la confección a través de moldes.
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