En 1909 aparece Hiram Bingham por primera vez en el Perú, como explorador de montañas conocemos de esta fecha por una visita que realizó a la zona de Choquerirao, asentamiento Tawantisuyo en el gran cañon del valle del Urubamba y su posterior arribo anónimo en acémila a Lima.
En el año de 1910 asumío el rectorado de la Universidad Nacional San Antonio de Abad del Cusco el Dr. Alberto A. Giesecke, de nacionalidad norteamericana, quien durante sus catorce años de gobierno universitario apoyo toda iniciativa referente a la Arqueología.
En enero de 1911, Don Braulio Polo y la Borda propietario de la hacienda "Echarati" del valle de la Convención tuvo como invitado en su propiedad al Rector Giesecke, a quien refirió que toda la región estaba sembrada de zonas arqueológicas y que entre ellas destacaba la cuidad de Machupicchu, cuyas afirmaciones podían ser corroboradas por gente de Mandor o San Miguel.
A su regreso de la Convención el Dr. Giesecke confirmo en Mandor lo comunicado por Polo y la Borda, escribiéndole a Binghan estas referencias. Parece que Binghan vino en 1909 al Cusco enterado de la existencia de ciudades perdidas en la maraña tropical de las montañas del Urubamba por la lectura de cronistas que referían a Vitcos yVilcapampa, supuestas capitales de Manco II y del viajero inglés Charles Wienner, quien consigna en el mapa del valle de Santa Ana las localidades de Machupicchu y Huaynapicchu(Perou et Bolivie. Recit de voyage, suivre Etudes Archeologiques et Ethnographiques et de notes sur l'ecriture et las langues des Populations Indiennes.Librairie Rachette et Cie..Paris 1880, 796 pp.27 cartas y 18 planos).
Wienner estuvo en la región por 1876, recogiendo las referencias de los vecinos para incluir en su mapa los nombres de Machupicchu y Huaynapicchu. Otras referencias sobre la zona monumental en mención, antes de Bingham, pueden encontrase en el Archivo Histórico de la Universidad del Cusco, en documentos referentes a linderos y dominios de la hacienda"Cutija" cabeceras del Valle de la Convención, o en documentos de la circunscripción de la provincia de Urubamba.
Con el conocimiento indudable de las referencias citadas más la confirmaciones de Giesecke y Braulio Polo, Bingham obtuvo la dirección y arribo de una primera comisión científica de la Universidades de Yale, con quienes estuvo en la ciudad Imperial, antes de Julio 1911. Los miembros de esta comisión se repartieron por diferentes puntos del Cusco.
A mediados de julio del mismo año Bingham viaja al valle de Vilcabamba, pasando por Melchor Arteaga, quien lo condujo por San Miguel hasta Machupicchu tras penosa ascensión por el flanco Este de la montaña llegando en julio 24 de 1911, la espesa cobertura boscosa que cubría a la ciudad no hizo posible una primera apreciación objetiva, sino que machete en mano desbrozaron algunas secciones de los muros, que inmediatamente hicieron pensar a Bingham en la supuesta capital de Manco II, idea que sustentó algún tiempo en sus relatos incluso hasta después que empezó a hablar de Pacareqtambo("Posada del Amanecer"), de donde los hermanos Ayar habrían emprendido su marcha al Cusco, ideas erradas para nuestros días.
Después de este primer contacto, Bingham se entrevista con Giesecke, regresa luego a EE.UU. volviendo a mediados de 1912, para trabajar directamente en Machuccpichu al frente de la misión. Anteriormente en Cusco el Sr. Giesecke había comunicado el acontecimiento a José Gabriel Cosio Secretario de la Universidad San Antonio de Abad y Catedrático de la Facultad de letras, sugiriéndole organizar una expediención,comprobatoria.
El Dr. Cosio habló con Don Enrique Palma quien decía conocer Machupicchu por haberla visitado diez años antes y apresuró los preparativos de la Expedición Universitaria Cusqueña. La comitiva estuvo compuesta además de los organizadores, secretario y Sr. Palma por los hermanos Justo y Luis Ochoa, quien después fuera General de Sanidad Dr.Alberto Lopez en ese entonces contaba con doce años de edad y algunos auxiliares.
Encabezados por el Dr. Cosio salieron con rumbo a la hacienda "Qollpani" en el Urubamba, cuyos copropietarios eran los doctores Ochoa. de allí se trasladaron al paraje conocido como playa San Miguel e iniciaron el ascenso a Machupicchu la mañana del 18 de enero1912.
Desbrozando la maleza de uno de los muros pudieron comprobar la inscripción dejada por Sr. Enrique Palma y otras tres personas el año 1902. Allí refirió Palma que aquel tiempo encontraron un arrendatario de apellido Meza, sembrando en chacras y algunas terrazas de Machupicchu, quien informó pagar doce soles mensuales a la hacienda "Cutija"; diez años más tarde los arrendatarios de esas mismas tierras eran Arteaga y Lizarraga, siendo el primero quien condujo seis meses antes a Bingham hasta la ciudad.
A fines de julio de 1912 y altamente motivados por los informes del Dr. Cosio, llegó a Machupicchu una nueva expedición formada por una veintena de universitarios cusqueños entre los que se cuenta el Rector Alberto A. Giesecke, Romualdo Aguilar catedrático de Derecho Procesal y otros entre profesores y alumnos.
Lo pésimo de estas expediciones nacionales es que no publicaron a nivel nacional las descripciones y apreciaciones realizadas. Quizás tenga razón Rafael Aguilar Páez cuando afirma que "El Dr. Bingham descubrió Machupicchu y lo conoció para hacerlo conocer al mundo culto, como otros muchos lo conocieron para su propio capote.. ..(Aguilar Paez1961:p.63ss.)
Los expedicionarios universitarios encuentraron a Bingham dirigiendo las excavaciones y reconocimientos de la primera expedición Nacional de Washington que había organizado en su reciente viaje a los Estados Unidos. La deforestación de la zona arqueológica estaba confiada a Elwood C. Bradis, en tanto que George F. Eaton reconociería las laderas del cerro, encontrando tumbas labradas en la roca por el flanco Este. Su informe titulado "The collection of Osteological Material from Machupicchu" New Haven,1916; es un modelo de reporte arqueológico que registra todas las asociaciones de los objetos recuperados.
Es presumible que Bingham venía trabajando silenciosamente los meses de junio, julio y agosto de 1912, pues acabamos de ver que a fines de julio lo sorprende la llegada de los universitarios cusqueños. Fueron tres meses y 15 días después.
El informe de Cosio es un cúmulo de alabanzas a Bingham, asistentes y demás personas participantes en aquellos trabajos de fiscalización, y recomendaciones para cautelar los intereses Nacionales.
Finalmente, dice Rowe que en 1915 se realizó la segunda expedición de la Universidad de Yale y la Sociedad Geográfica Nacional de Washington. Bringham estableció su cuartel general en Ollantaytambo y exploró las vías de acceso incaico de Rosaspata en Vilcabamba. Las colecciones arqueológicas de las varias expediciones de Bingham están en el Museo Peabody de la Universidad de Yale (Rowe 1959: pag.8).
Hasta aquí estos son los datos históricos más resaltantes sobre las actividades
de Hiram Bingham en el Perú. Vamos a ensayar ahora su enjuiciamiento crítico
sobre el particular, pero antes es oportuno señalar que Enrique Portugal,
periodista Arequipeño que vivió muchos años en Argentina, denunció en los
diarios y revistas Bonaerenses el incalificable saqueo que se perpetraron en
Machupicchu, en otros documentos durante sus repetidos viajes de Bingham de
"exploración " al Perú Portugal señala que:
"Con ayuda de unos y la ignorancia de otros el audaz aventurero escalador de
montañas saqueo la ciudadela, llevándose riquísimos cargamentos de objetos de
oro y obras de arte que hoy se hallan en diversos museos de Norteamerica. Amasó
fabulosa fortuna . Yo acuso directamente a Hiram Bingham y por extensión a todos
sus complices silenciadores peruanos como el más peligroso y directo pirata que
holló Machupicchu". (Portugal,1961: pag.66).
En verdad, lo dicho no está lejos de la realidad, por el contrario, es una valiente denuncia no refutada hasta la fecha. Ya vimos como otras personas llegaron mucho antes que Bingham a Machupicchu, el mismo Dr. Giesecke expresó, en una nota publicada en El Comercio en 1961, que: en realidad los primeros descubridores de Machupicchu fueron aquellos que lo habitaron y que huyeron de la justicia por razones de índole política también declaró que debieron estar allí ganaderos que buscaban sus animales y algunos agricultores que muy cerca cultivaban sus chacras. Concluye Giesecke que sea uno u otro quienes lo hayan descubierto lo importante es convertir esas ruinas en la mayor atracción turistíca del Perú; nosotros pensamos que sí es importante reflexionar acerca de este "descubrimiento" por Bingham puesto que hasta el propio Giesecke, duda al decir "no importa que sean unos u otros", poniendo prácticamente en evidencia el plagio consumado por aquel. En realidad Bingham sólo fue un aventurero financiado por las entidades norteamericanas consignadas lineas antes; ni siquiera era arqueólogo, pues en un arrebato de única sinceridad confiensa que:
" La arqueología estaba fuera de mi campo y sabía muy poco de los incas, excepto la fascinante historia contada por Prescott, en su famosa "conquista del Perú"..." (Bingham,1970;p.170)
No fue una agradable introducción al reconocimiento arqueológico, especialmente para mí, que no tenía experiencia ni conocía mis deberes.
Por fortuna tenía conmigo el libro extremadamente útil "Sugerencias para viajeros" En uno de sus capitulos Royal Geographical Society. En uno de sus capitulos descubría que se debía hacer cuando uno se encuentra frente a un sitio prehistórico; tomas cuidadosamente mediciones, muchas fotografías y describes cuidadosamente como sea posible los hallagos" (Bingham 1970:p.187).
Estas confeciones lo desautorizan totalmente para trabajar una zona arqueológica monumental y hasta en el más pequeño sitio arqueológico de cualquier parte del mundo, pues parece que ni buen explorador era, a juzgar por la cita anterior.
El libro "the lost city of the Incas" es un escrito anecdótico que narra peripecias y situaciones curiosas rayanas en el asombro ingenuo de un yanqui carente de formación especifica.
El libro de marras no contiene dato arqueológico alguno pudiendose percibir más bien a lo largo de sus 374 páginas, una voluntad conciente de ocultar, mentir y deformar la realidad de los acontecimientos pues se aprehende algo así como una mutilación patente en todo lo relatado en suma, este libro dice que Bingham no encontro nada en la ciudad, salvo unos cuantos cacharros, objetos de espinas vegetales y unos que otro artefacto de cobre. Como si no supieramos que las tumbas de la nobleza Imperial albergaban al fardo o fardos de sus difuntos engalanados con un prolífero ajuar funerario a base de fina cerámica, artisticos objetos de oro, plata y otros metales, formas de arte lítico, textiles, etc, de lo cual no se dice una palabra.
Bingham proclamo a los cuatro vientos que el fue el primero en llegar a Machupicchu a través de los escritos que publico sobre la ciudad, entonces si llego primero, fue tambíen el primero en apoderarse de todo cuanto encontro allí.
Las caracteristicas edeticas señaladas para "Los city of the Incas : story of Machu Picchu and its builders" nueva York, 1984, tambien pueden detectarse en escritos anteriores como "Vitcos, The Las Inca Capital"; publicado en "Haper's Magazine" Abril1913." In the Wondearland of Peru" publicado en la "National Geographic Magazine" Abril 1913, p.387-573."The inca Peoples and their Cultural" XIX congreso Internacional de Americanistas Washintong, 1917, actas y Memorias pp.253-260."Inca land" Boston 1922. ( tercera edición y ultima en 1923), pp.347-351. "Machu Picchu, a City of the Incas", publicado por "National Geographical Society",Yale University Press, New Haven, 1930.
Empero es de justicia considerar que los mejores estudios sobre Machupicchu, Cusco y los materiales obtenidos durante las expediciones de Bingham, han sido publicados por The collection of Osteological material from Machu Picchu, "Connecticut Academy of Arts and Sciences ( Memoirs',VolV) New Haven,1916 "Food Animals of the Peruvians Higlands" XXI Congreso Internacional de Americanistas, Cotemburgo, 1925. Actas y Memorias vl 2, pp 61-66 C.H. Mattewson, "A mettallographic Description of some Ancient Peruvian bronzes from Machu Picchu" Publicado en American Journal Of Sciencie Diciembre de 1915, pp.525-602. Of Cook, "Staircase farmas of the ancients" publicado en "National Geographic Magazine" Washington. Mayo de 1916, pp.474-534; es todavía uno de los mejores trabajos sobre la agricultura de los andes centrales. Todos publicados en los EEUU.
No conocemos ningun escrito de Elwood C. Erdis, que dirigio las excavaciones de Machupicchu con escasisimo personal indigena - mestizo trabajo con ellos, en realidad solo como guias.
Así pues, " Bingham" además de plagiar el descubrimento de Machupicchu desmantelo y enajendo en forma inmesericorde sus materiales arqueológicos.
Durante el primer gobierno del presidente Leguia ocurrieron las actividades de Bingham en el Perú ; los problemas politicos, economicos y sociales que afrontaba no le permitieron probablemente enterarse de la magnitud del saqueo que estaba siendo objeto el Perú en 1911-12 no había carretera, trasporte automotor, ni avion y el viaje a Cusco duraba muchos días, además del voluntario ocultamiento de Bingham, quien solo comunicaba los acontecimientos a nivel de su representación diplomática, el Rector norteamericano tambíen callaba los sucesos, limitandose a realizar dos expediciones como ya vimos pero como no podia pasar desapercibida la presencia en el Perú de una legíon de ciudadanos extranjeros"asistentes" de la expedición Bingham, que iban y venían del Cusco, las autoridades de Lima empezaron a tomar nota ; los problemas ocasionados por un motín surgido en el puerto de Mollendo a fines de 1911 publicado en "La Nación" de Argentina, suplemento dominical de 30-1-1938, por la folklorista Argentina Ana S. de Cabrera, condenando a la expedición Bingham que motivo el referido motín popular debido al subrepticio envio de cajones rotulados como "sherds" no eran si no momias completas con todo su ajuar funerario u otros materiales, por su puesto el funcionario aludido desparecio del cargo, se trataba entonces del quinto voluminoso despacho de cajones bajo la fuerte custodia de ciudadanos norteamericanos expresamente comisionados por Bigham para su salida al exterior.
Otras propuetas en Puno Arequipa y Mollendo hacía 1912 (Portugal,1961:p72) precipitaron una tardia reacción del gobierno Leguista nombrando al Dr. Cosio, que ya hemos comentado, es oportuno señalar aqui que dos gobiernos de Leguía significaron grandes y diversos tipos de despojos para el Perú.
El museo de sitio de machupicchu paradojicamente no muestra material arqueológico pertinente a la zona; fotografías, calcos, uno que otro objeto, cuadros de flora y fauna, componen sus fondos. Igual pobreza de material respectivos se señala para el museo arqueológico del Cusco. Los estudios citados antes evidencian a los materiales arqueológicos en su libro "Machupicchu el más famoso monumento arqueológico del Perú"Eudeba.Col. Biblioteca de america 11 Buenos Aires,1964pp.72-82;incluso en la página 81 dice que:
Tres magnificos ejemplares de piedra reproducidos en las laminas 22, 23 y 24 han sido incorporados en el Peabody Museum de Yale en la Colección Machupicchu, aún cuando no aparecen en ningun libro y demas publicaciones de la expedición Bigham. Los tres fueron adquiridos por esta en el Cusco, procedente del "museo "que pertenecio al señor Tomas Alvistur, quien a su vez, los compro de vecinos de la misma zona en que se ubican las famosas ruinas( Varcarcel 1964:pp81-82).
De esto se infiere además que los integrantes de la expedición Bingham dedicandose a comprar objetos arqueológicos en cuanto oportunidad se presentara, mostrando una vez más la predemitación y avelosía en la consumación del despojo.
Ya hemos señalado que el Museo de Sitio actual construido en la margen izquierda del rio Urubamba carece de materiales arqueológicos para contemplación de propios y extraños en cambio Bigham de explorador desconocido que era, se elevo despues del saqueo de Machupicchu a doctorados en historia, gobernación estatal, cat´edra en Yale, senaduria y regio satus socio-económico.
Con su acción el país sufrio uno de los mayores despojos arqueológicos de nuestra vida contemporanea. se dice que Bingham tiene el merito de haber logrado para Machupicchu la revelación de su existencia para el mundo científico (Varcarcel 1964 ;p 68) y la resonancía mundial que posee, pero nosotros consideramos que si esto es así, el país ha pagado un precio altisimo por ese "Favor o ayuda", como todos los paises dominados.
Desde luego discrepamos con algunas elogiosas opiniones para Bigham que vierte Varcarcel en su "Libro citado" pues son de su responsabilidad, tal como asumo las mias. es harto condenable presentar a Bingham en los textos nacionales como descubridor de Machupicchu, siendo preferible tenersele como uno de los mayores ejemplos de pirateria cultural que ha sufrido el, país y motivo de preocupación constantes para analizar lo que ocurre ahora con las misiones arqueologicas extranjeras operando en el territorrio nacional avaladas o no por resoluciones Supremas no fiscalizadas pertinentemente, en consideración a los hombres prestigiosos de sus ejecutivos.
Tomado del texto: Arq. Alberto Bueno