Entre los motivos que perduran en este periodo es la decoración geométrica, producto de la tradición anterior, aunque en esta fase los motivos se vuelven más puros". Se aprecia mucho la representación de "motivos zoomorfos como la iguana y la serpiente; se presenta el relieve como técnica decorativa, estilizando motivos antropomorfos y zoomorfos". Existe una predilección por las esculturas zoomorfas que evidencias gran realismo de sus modelos, existiendo mas armonía y arte en sus formas.
En lo que respecta a las conformaciones morfológicas esta se orientan a las representaciones de cuerpo entero, destacando entre sus elementos fitomorfos y zoomorfos, acentuándose la confección y producción de la cerámica de carácter religioso, entre ellos cántaros globulares de asa estribo, botelliformes de pico corto, cancheros y otros elementos en la su aseveración morfológica ya no son tan achatadas como en el periodo anterior.